LAS ESTRATEGIAS DE ALIEN ENO
¿Qué tienen en común The unforgettable fire, The Joshua tree, Achtung baby y All that you can't leave behind de U2, Fear of music y Remain in light de los Talking Heads, la trilogía de Low, Heroes y Lodger de David Bowie y Frantic de Bryan Ferry? Además de que varios de ellos son obras maestras, y todos son muy buenos discos, el hecho de que Brian Eno haya sido su productor o coproductor, o al menos productor de algunas canciones, como en el caso de Frantic. Sus trabajos como integrante de Roxy Music y de The Passengers y solista precursor del ambient han quedado algo relegados en el conocimiento del mundo del rock, tal vez porque, como notara el escritor argentino Rodrigo Fresán, "el verdadero genio de Eno se hace patente en segundos y terceros en los que se queda a vivir (...) Eno es Alien". Aquí va una nota acerca de sus peculiares métodos de trabajo.
Nacido Brian Peter
St. John Le Baptiste de la Salle Eno el 15 de
mayo de 1948 en Woodbridge, Inglaterra, el futuro profesor loco del rock se enamoró
de la música a los siete años, cuando escuchó un hit del
doo-woop llamado "Get a job", de los Silhouettes, difundido por la radio de
una base aérea norteamericana cercana a su casa.A los 16 entró a la Escuela de Arte de
Ipswich.
(Algún día habrá que estudiar su influencia en
el rock inglés: por ellas pasó también gente como John
Lennon, Pete Townshend, Freddy Mercury, Ron Wood o Bryan Ferry). Entró
pensando que le iban a hacer dibujar naturalezas muertas, o estudiar teoría
de los colores y anatomía, pero en realidad había entrado en una
escuela totalmente revolucionaria. La primera tarea asignada a los alumnos era
trazar un perfil psicológico de cada uno de sus compañeros. Una
vez determinadas las principales características de cada uno, la idea
era reaccionar durante dos meses de forma totalmente opuesta.Cuenta Eno: "yo era impulsivo, enérgico,
más bien autoritario. Mi nuevo personaje debía ser un tipo reservado,
disciplinado, que hace todo lo que le dicen que haga y ejecuta todas las instrucciones.
Al final, como mi comportamiento no era del todo adecuado para mi nuevo perfil
psicológico, me pusieron en una silla de ruedas para que no fuera a ningún
lado por mis propios medios". Era un juego y todos se divirtieron, pero
su objetivo era remover costumbres, actos reflejos, automatismos, rutinas. Liberarse
de cadenas y ayudarse a poner en movimiento la creatividad, en suma. (A la derecha, imagen reciente hacia 2006)
También en la escuela, Eno comprendió
que los sonidos podían tratarse como los materiales que componen un collage.
"La cinta de grabación se convierte en algo plástico, manipulable.
La podés cortar, pegar, dar vuelta... La música se convierte,
de esta forma, en algo tangible, montable y desmontable".A fines de 1970 recibió un llamado de
un amigo, el saxofonista Andy McKay, quien le
propuso unirse a un grupo en formación:
Roxy Music. Al principio, Eno comandaba la consola de sonido y cantaba algunas
líneas vocales. "Estaba en le medio de la platea, frente a la consola,
y de repente me ponía a cantar. La gente se ponía un poco loca
y se preguntaba quién era ese tipo que cantaba en medio del público".
La química de la banda distaba de ser perfecta. Tenía dos públicos: los que iban a ver a Bryan Ferry y los que iban a escuchar los exquisitos arreglos de teclados de Eno, que además lucía muy glam, con sus corsés de terciopelo, sus boas de plumas y su maquillaje chillón. La competencia estalló en una actuación en vivo en York, cuando la gente vivó a Eno mientras Ferry cantaba Beauty queen. Eno, que tenía dos proyectos paralelos, la Portsmouth Sinfonia y un disco con Robert Fripp, y era el niño mimado de la prensa rockera inglesa, pensó que si se bajaba del escenario evitaría más problemas. Bryan Ferry malinterpretó el gesto, y luego dijo que jamás volvería a compartir un escenario con el tecladista. El enfrentamiento duró casi treinta años, y la excusa para reencontrarse fue justamente "Frantic".
En 1973, liberado de sus compromisos, Eno se
encerró en un estudio a producir la música que deseaba hacer: "cuando recién empecé a grabar, el estudio era una especie
de herramienta de registro de canciones ya escritas. Pero, para mí, el
estudio significaba la posibilidad de pensar a la música de manera diferente.
No como algo que tenga que ejecutarse en tiempo real, sino como algo que puede
ser construido, como una pintura. Me permitía pensar en situaciones,
atmósferas y paisajes, más que en la linealidad de la narración". Después de
tres discos solistas, otro con Fripp y otro con su ex compañero de Roxy
Music Phil Manzanera y con Nico y
John Cale, ambos ex Velvet Underground, a
mediados de 1975 estaba tan absorto en su trabajo que, caminando distraído
por la calle, fue atropellado por un taxi y terminó internado en un hospital.
Esta desgracia terminó abriéndole la puerta de un nuevo mundo:
el ambient. Incapaz de moverse de su cama para subir el volumen de su estéreo, una tarde de lluvia, descubrió
que la música podía ser tan susceptible de combinación
como el color o la luz. Algo que exploró especialmente en su disco conjunto
con David Byrne, My life in the bush of ghosts, de 1981, en el que música
folklórica libanesa, voces de la radio y desaforados sermones evangélicos
se entrechocan sobre bases hipnóticas.
En una entrevista de 1995, aclaró cuál fue el concepto que guió a ambos: "Lo que yo siento acerca de las grabaciones últimamente es que suenan como si hubiesen sido diseñadas para encajar en un CD. Y pienso 'Qué aburrido. Lo que quiero es algo que parezca tener toda clase de partes que no terminen de encajar, así puedo intentar adivinar cuáles son.' Esto se puede escuchar mucho en las grabaciones de jazz, en especial en las que son en vivo, donde no podés terminar de identificar completamente lo que está sucediendo, lo que tiene el efecto de inducir a una escucha creativa, porque uno empieza a inventar cosas para llenar los vacíos. Yo quiero que eso suceda, y la improvisación es una de las formas de lograrlo. La improvisación es como si le dijese al oyente 'Esto está realmente sucediendo, y no sabemos hacia donde esta yendo'".
LAS ESTRATEGIAS OBLICUAS
"Cuando trabajaba en estudio, junto a los
Roxy Music, me di cuenta de que el pánico generado por los altos costos
de las horas de grabación lleva a los músicos a preocuparse más
por los resultados que por los trabajos experimentales, que podrían no
llevarlos a ninguna parte. Como consecuencia de eso, se enfoca la atención
en las técnicas ya probadas y ensayadas".
De
esa convicción nacieron las Estrategias Oblicuas: una lista de aforismos
destinada a explorar caminos laterales que pudieran resultar interesantes. Eno
estuvo escribiéndolas durante años, hasta que descubrió
que un amigo suyo, el pintor Peter Schmidt, tenía una lista similar.
Ambos decidieron juntarlas y publicarlas en forma de juego de 113 cartas tipo
tarot. Hicieron un primera edición de 500; la segunda ya fue 10 veces
mayor.La idea es encontrarle un enfoque diferente
a la tarea que uno está haciendo, ya sea porque se empantanó o
porque desea encontrar un desarrollo alternativo, o simplemente por deseo de
experimentar un poco. (Después de todo, el método de aprendizaje
infantil por excelencia es el de ensayo y error). "Uno vuelve a ver todo
lo que hizo en un nivel conceptual, y se pregunta '¿qué estoy haciendo?'
en lugar de decir '¿qué tal suena esta guitarra?' El ejercicio concreto
consiste en parar el trabajo en determinado momento y sacar una carta al azar,
para seguir adelante con sus instrucciones". Algunas de las estrategias tienen un cierto
aire a budismo zen, y también recuerdan a los hexagramas del I Ching.
Dicho sea de paso, el célebre novelista norteamericano Philip K. Dick
solía usar ese sistema oracular para ayudarse a escribir. (Dick es el
autor de las novelas que sirvieron de base a películas como Blade Runner, El vengador del futuro, Minority Report o A scanner,
darkly, y de hecho era admirador de Eno).
ALGUNAS ESTRATEGIAS * Honrá tu error como intención oculta.* Resistí abiertamente el cambio.* Descansá un poco.* Volvé atrás.* Que todos cambien de instrumentos.* Cambiá los roles de los instrumentos.* Sölo un elemento de cada cosa.* ¿Hay secciones? Concentrate en las transiciones.* Hacé una lista de todas las cosas que podrías hacer, y hacé la última.* Después de todo, es absolutamente posible.* Eliminá las ambigüedades y convertilas en algo específico.* No te avergüences de usar tus propias ideas.* ¿Qué haría tu mejor amigo?* Usá una idea vieja.* Andate a tu casa y empezá mañana todo de nuevo.
AGREGADO DEL 30/04/2023: hoy le pedí a ChatGPT que, a partir de esta nota, generara algunas estrategias similares. Varias eran bastante obvias, meros desarrollos de las ideas ya expuestas, pero me pareció interesante dejar que el lector juzgara este uso de la inteligencia artificial en el que creo que David Bowie o Brian Eno se hubieran anotado, al menos por curiosidad. A continación les copio algunas sugerencias:
* Usá un instrumento que nunca has utilizado antes. * Limitá la cantidad de notas que se pueden tocar en una canción. * Cambiá la velocidad de la grabación. * Usá un objeto cotidiano como instrumento. * Dejá que un niño toque uno de los instrumentos en la grabación. * Trabajá en la oscuridad. * Usá un instrumento de manera inusual. * Creá un ambiente en la grabación con sonidos que no tengan nada que ver con la música. * Grabá una sesión de improvisación y editá sólo las partes que te gusten. * Incorporá algún elemento del azar en la grabación. * Grabá en vivo sin ninguna preparación previa. * Tomá un fragmento de una grabación antigua y usala para crear una nueva canción. * Cambiá la perspectiva de lo que se considera normal. * Hacé una lista de cosas que no tienen sentido y creá una historia alrededor de eso. * Usá diferentes niveles de realidad en una misma historia.
FUENTES
* Gachi Pisani. "Brian Eno, un bicho raro". Suplemento Sí del diario Clarín, viernes 22 de enero de 1988.
* Robert Doerschuk. Reportaje de Keyboard Nro. 227, marzo de 1995:
* Rodrigo Fresán. "Dandy". Suplemento Radar del diario Página/12, domingo 5 de mayo de 2002.
* Estrategias oblicuas
Una version previa de esta nota fue reproducida en la revista virtual uruguaya LadoB..., en su número de enero de 2003.